Otro cine español es posible. Sin revisiones edulcoradas o maniqueas de la guerra civil y el franquismo. Con historias entretenidas. Sin grandes presupuestos megalómanos y subvencionados. Con guiones inteligentes y economía de medios. Sin los mismos de siempre. Con actores verosímiles a los que se entiende cuando hablan. Sin caspa neoprogre y pseudomoderna. Con sentido del humor y del espectáculo. Sin pretensiones ético-moralizantes pero con ambición creativa. Con éxito de público, y de la crítica...
Por ejemplo [•REC], de Jaume Balagueró y Paco Plaza, dos jóvenes directores españoles que han mamado cine de género desde la cuna y saben buscarse la vida sin andar llorando por los Ministerios y Consejerías del ramo.
[•REC] es una buena peli de terror, de bajo presupuesto y alta sofisticación técnica (que no se nota!). No pasará a la Historia del Septimo Arte, pero te hará pasar un buen rato. ¿Que de qué va? Ejem... Digamos que es una historia de zombis barceloneses, facción Dreta de l'Eixample. Como dice Santiago Navajas, ¿en qué otra ciudad de España, gafada y arrasada por adversidades de todo tipo, podría transcurrir esta parábola sobre el otro?
Aquí, entrevista con los autores>>
(Otra gran sorpresa de la velada cinematográfica de la otra tarde: en la misma sala se proyectaba íntegro el-ya-clásico-anuncio-navideño-de-Freixenet, realizado este año por Martin Scorsese en plan Hitchcok. Una auténtica maravilla llena de guiños cinéfilos. Puedes verlo clicando aquí>>)
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2 comentarios:
Disculpe, Lynx. ¿En qué se basa usted para suponer que esta película no está financiada como cualquier otra película española? Es decir, con un 30 por ciento del presupuesto (como máximo) a cargo del Ministerio de Cultura, que se cobra dos años después del estreno. Me parece muy bien que le haya gustado y me la apunto, pero la productora ha cogido su parte de los fondos de ayudas al cine como cualquier hijo de vecino.
Otra cosa es que estas películas consigan traer espectadores (y dinero, e industria) al cine español; y yo creo que sí es posible, cuando se piense más en entretener y menos en mirarse el ombligo.
Mi querido y discutidor Vince: en nada me baso desde que en ningún lugar de mi comentario se afirma que esta película no esté "financiada como cualquier otra película española".
Tan sólo digo que no es megalómana en sus presupuestos (como "El Dorado"; o "Muertos de risa"; o "Tirante el Blanco", o "Alatriste", o "Yo soy la Juani", "GAL", "Volver"...).
Y también afirmo, tras rastrear a esta pareja por la red, que Balagueró y Plaza no son quejicas ni llorones, ni van por ahí dando la brasa de que "hacen falta más ayudas para el cine español".
O sea.
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