Venía a Madrid a presentar su nueva creación, Spore, que el viernes se pone a la venta en España y Portugal. Y lo hizo en un marco verdaderamente insólito para este tipo de eventos marketinianos: el Instituto de Química-Física Rocasolano, del CSIC (Consejo Superiror de Investigaciones Científicas).
Y es que Spore es un sofisticado juego, lleno de guiños y referencias culturales, que no se parece a ningún otro: a partir de seres unicelulares, el jugador va haciendo evolucionar a sus criaturas según pautas estrictamente darwinistas, desde la bacteria a la tribu primitiva para llegar hasta las más extravagantes civilizaciones que, finalmente, se lanzan a colonizar de la galaxia y el Universo. Pura astrobiología.
Víctor Sánchez ha hablado con él sobre videojuegos, ciencia y Evolución en el último número de la revista Muy Interesante. Puede leerse la entrevista completa aquí >>.
* Antes de ponerse a la venta, los internautas de todo el mundo ya han diseñado 3,2 millones de especies (el doble de las existenters en la Tierra) gracias al ingenioso Creature Creator. Se puede descargar gratis aquí>> . Y salen bichos tan increíbles y divertidos como éste:
Aunque no lo parezca, el jueguecito es toda una apasionada declaración de principios evolucionistas frente a la ola de neocreacionismo que nos invade, eso sí disfrazada de "diseño inteligente".
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