sábado, 20 de febrero de 2010

Se les ha pasado el arroz


"Pocas clases políticas pueden jactarse, como la catalana, del prestigio que gozó durante la transición e incluso antes, algo insólito en toda España, incluido Euskadi, por supuesto. El prestigio de su clase política, incluso el respeto, fue una singularidad catalana que implicaba muy específicamente a su izquierda. ¿Cuándo se les pasó el arroz? Ni la mente del derechista más retorcido sería capaz de imaginar cómo fue metiéndose ella sola, con su solo impulso, sin necesidad de empujarla mucho, en un laberinto con apenas dos salidas: el aislamiento y la poza séptica. El aislamiento lo define la reducción de su base social, y la poza séptica, la corrupción institucional y transversal. Hay un amplio muestrario, desde el Fòrum aquel de las Culturas hasta el Palau, con parada y fonda en Santa Coloma
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2 comentarios:

Joan dijo...

Leído en abstracto, el artículo parece inobjetable: la política catalana, que parecía un cúmulo de virtudes, se ha descompuesto; ese arroz, que en su punto era una delicia, “se ha pasado”.
Pero si lo situamos en su contexto, enseguida se hacen visibles las intenciones ocultas.
Morán ataca sistemáticamente a la izquierda, fingiendo que lo hace desde el más puro radicalismo. No es una casualidad que escriba en La Vanguardia. Ahí le pagan para dar palos a todo lo que no sea CiU, supuestamente desde la izquierda, con la conocida estrategia de la cuña de la propia madera.
No otro sentido tienen sus frecuentes exabruptos contra Rosa Díez, lanzados con chulería, como de paso y sin aportar la menor justificación ni argumento.
Hace poco lo reconocía sin rubor en uno de sus artículos: “nosotros estamos con quienes nos pagan”. ¿Y quién le paga? pues CiU, es decir, La Vanguardia.
Leyendo un poco entre líneas el artículo, constatamos cómo Morán sutilmente exime de sus críticas a CiU que, por defecto, acaba santificada.
Incluso tanto al principio como al final del texto se pueden leer claras alabanzas a CiU, sibilinamente disimiladas para contentar a sus amos sin dar la cara. Ese laudatorio y reiterado “creíamos que éramos…” ¿a quién se refiere sino a la etapa de CiU? Y ¿qué me dicen del final?: “Todo eso lo hace mejor, y con mayor sentido, la derecha” más claro, agua; aunque luego haga como que lo atenúa para seguir dando gato por liebre.
Morán está en la misma línea de los Sánchez Dragó, Amando de Miguel, Ramón Tamames, etc., etc., ex-comunistas reconvertidos a la derecha y pagados por los periódicos de la derecha para atacar a la izquierda. La única diferencia es que Morán lo hace de forma más “sibilina” e “intempestiva”, adoptando el disfraz de una crítica radical desde la izquierda.

Lynx dijo...

Gracias por tu comentario, Joan