Andy Riley es un guionista de la televisión pública británica. Su humor so british es tan popular en Inglaterra como poco conocido en España (la BBC ha emitido esta temporada la primera entrega de su comedia de ciencia ficción Hyperdrive, ambientada en el año 2151). Elusivo, poco amigo de los focos, se está haciendo famoso en todo el mundo, quizás a su pesar, gracias a sus pequeños e imaginativos conejos depresivos y suicidas.
Han leído bien: suicidas. Los estoicos roedores de Riley aplican su ingenio a idear formas eficaces y rotundas de quitarse de en medio. Mis preferidos son estos tres, Día-D, en un lanchón de desembarco (click en la imagen para los detalles).
Elijan los suyos: aquí hay un buen aperitivo; y aquí, una rara (e interesante) entrevista con el autor.
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(Moitas gracias/grazas outra vez, Filomena)
4 comentarios:
Gracias a usted. ;)
me quedo con el de la patada en los mismísimos a los ETs invaders :DDDD
Un comando de yihadistas muy liberadas se introduce en los Estados Unidos con objeto de atentar contra las instituciones. Su plan, explotar en pleno éxtasis con los congresistas a los que seducen, inmolándose así para llegar al paraíso.
Bien, otra vision del suicidio.
Seguro que si somos honestos en algun momento nos hemos encontrado en el lugar del conejito, y no voluntariamente.
Riamonos juntos, son buenos, y es tan sano reir.
Estoy de acuerdo contigo Nuala, es un humor inteligente y sano, a pesar de la dureza del mensaje.
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