El primer email me llegó el viernes; rebotado por mi hija, que lo había recibido, encadenado, de un amigo, ex-alumno del Liceo. Esa noche, unas 10.000 entradas de Google ya hacían referencia al famoso apagón "contra el cambio climático", propuesto para el 1 de febrero en Francia.
Cuatro días después, lo que al principio sólo era la iniciativa local de un grupo medioambientalista galo se ha convertido, gracias al dominó-internet, en una acción global que ya suma 336.000 googles en el momento de postear esto (y seguro que esta noche también sale en el Telediario de La 2).
Todo tipo de organizaciones más o menos ecologistas, radicales y juveniles se han sumado a una propuesta-protesta que nadie sabe muy bien contra quién se dirige o para qué sirve, excepto para demostrar una vez más el impresionante efecto multiplicador de cualquier acción online de caracter espontáneo.
Bienvenidos a la web 2.0.
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3 comentarios:
Me parece una buena iniciativa. Y tendremos que irnos acostumbrando. Este tipo de actos colectivos son, en una gran medida, una manifestación real de opinión. Cuando sea posible cuantificar el número, origen e identidad de los opinantes, llegaremos a ejercer el derecho al voto así.
¿os imagináis cambiar de primer ministro con un preaviso electoral de 72 horas? O aprobar y derogar leyes básicas del ordenamiento? O suscribir convenios internacionales, o adherirse a la OTAN? O hacer referenda con respecto de comunidades históricas, o históricamente disonantes? Vértigo, eh? Thx. Lynx.
PD.- Vivas las H grandes y con "brillor".
Vendell, me ha convencido.
Apagaré, a ver!
En la oscuridad nos sentiremos todos. Cinco minutos, pero intensos.
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