James Randi es un famoso mago "científico y escéptico", enemigo declarado de la charlatanería sobrenatural.
Desde hace tiempo, ofrece un millón de dólares a cualquiera capaz de demostrar supuestos poderes psíquicos, en una prueba concreta sometida a escrutinio y validación de terceros, que va cambiando desde 1964.
Pues bien, por primera vez en la historia del premio, el desafío de este año –averiguar el contenido de una caja fuerte, sellada a miles de kilómetros y utilizando sólo el poder de la mente– ha sido resuelto. Pero no por un vidente o un parapsicólogo; sino por un criptógrafo y su ayudante.
Lo cuenta en detalle Kevin Poulsen en e27B Stroke 6, el blog de la revista Wired especializado en privacidad y seguridad digital. Y con elegancia declina reclamar su pasta, desde el suyo, Matt Blaze, el científico curioso que visualizó el misterioso contenido de la caja y descifró el enigma. Por cierto, era un CD.
(Más, aquí: Kriptópolis; y en microsiervos)
(Gracias JotaCé!)
1 comentario:
el año que viene me presento...
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