martes, 15 de agosto de 2006

15 de Agosto: la Vírgen!

Si para los sociólogos marxistas de mi infancia, la ciudad moderna era el "paradigma emblemático de una sociedad de clase alienada y consumista", habrá que concluir que, en tal día como hoy –la Vírgen de Agosto, creo–, el personal pasa ampliamente de paradigmas, emblemas, clases, consumos y alienígenas.

Tal que así estaba, hace sólo un rato, la calle mayor de mi pueblo, esquina con aquí.

Dan ganas de gritar, de salir corriendo, de cometer algo, no sé... una película, un delito, un cuadro de Antonio López...

(los que no tenemos más remedio que quedarnos, siempre podemos distraernos leyendo en el parque el último y divertido artículo de Cristina Losada; o el del maestro Espada en "El Mundo", sobre Carmen Balcells. Impagable).

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno el artículo de Mr. Arkadi, si señor; me endulzó el desayuno, el problema es que su enlace no funciona, lynx.

Se lo corto y pego aquí por si alguien se lo ha perdido, no tiene desperdicio:


"Sobrevida"/ARCADI ESPADA (El Mundo)

La agente Carmen Balcells ha sido siempre una mujer muy prudente. Se le conocen pocas entrevistas, aunque muchas confidencias; y ha tenido la astucia de dejar que otros hablen de ella antes que hablar ella misma: dado que los otros son, pongamos por caso, Gabriel García Márquez, la elección ha sido un gran éxito de crítica y público. La prudencia ha sido también su norma en política. Es meritorio, dada su materia prima, que nunca pronunciara una palabra más alta que otra en el famoso caso de los escritores catalanes que escriben en castellano, resistiendo, incluso, la ocasión célebre en que el siempre presidente Pujol declaró que Cervantes no formaba parte de la cultura catalana. Balcells calló a la manera como se calla en los lugares civilizados, es decir, asintiendo. Calla la Caixa, calla Balcells. Un estilo.
De ahí el estremecimiento general cuando se ha sabido, a través del periódico Juventud Rebelde (lo que hoy leen el hombre y la mujer informados), que la agente Balcells ha enviado una rosa blanca a Fidel Castro. Cabe advertir que no puede tratarse de una metáfora. La rosa existe y llegará, porque la especialidad de la agente Balcells (otro pie firme de su leyenda) ha sido la de convertir en táctiles las metáforas de sus agenciados. Sin embargo, el que la rosa no sea una metáfora permite observar las que hay en ella. Y la principal: cómo los dictadores llamados de izquierdas hacen perder la prudencia incluso a los que viven del comercio. Conozco a muchas personas que defienden las ideas y la práctica castrista. Obviamente, no son las únicas que conozco con malas ideas. Yo mismo tengo unas cuantas. Pero éstas se llevan con discreción y carga íntima; lamentando la pasión enferma y derivándolas hasta los pliegues oscuros de la memoria y el ser. Por el contrario, la falta de vergüenza con que se exhiben las malas ideas de izquierda es impresionante. Ver a Balcells como agente del castrismo es una broma cínica muy pesada, desde luego. Pero sale gratis. O sea: que, contra lo aquí defendido hasta la última raya, la rosa blanca es un fino acto de prudencia. Perfectamente inserto en la blindada tradición.

(Coda: «Carmen Balcells, la agente literaria más famosa del mundo, acepta que publique en esta página el mensaje que le llega hoy, 13 de agosto, a nuestro ministro de Cultura. Ella misma me dicta cuidadosamente la nota para Abel Prieto, que va acompañada de una rosa blanca: 'más que un mensaje en una botella enviada al mar, te mando a ti una rosa blanca pidiendo que nuestro amigo y Comandante sobreviva'. En una reunión familiar, a la que asistieron la viuda y la hija del escritor comunista Juan García Hortelano, los profesores Ana [Ramón] y Luis Izquierdo, y los cubanos Rebeca Chávez y Senel Paz, Balcells nos explicó el significado de ese deseo de sobrevida para Fidel: 'Hablo de la sobrevida de la enfermedad y de la sobrevida de la Revolución. Quien tenga conciencia de lo que es este mundo hoy, no puede ignorar que Fidel y Cuba nos son imprescindibles'. (Rosa Miriam Elizalde, Juventud Rebelde, vía http://ultimosdiasfidel.blogspot.com).

Anónimo dijo...

Ejem...para leer LD en el parque hay que estar muy, pero que muy "wired"

Lynx dijo...

perdone que le diga: siempre conectado, not wired, en todo momento y lugar!

Anónimo dijo...

Sr. Lynx,
Si se piensa que hay vida más allá de Cristina Losada ...también días de éstos son días de "lavar el coche" (incluyendo aspirado,... matiz a tener en cuenta, pasatiempo generalizado de la España actual :-)" o para disfrutar, por lo novedoso...de aparcarlo donde apetezca, en cualquier calle de Madrid...experiencia única en ésta ciudad...casi dan ganas de pasarse el día entero aparcando y volviendo aparcar por no esperar otro año más para vivir tal experiencia...Eso sí...entre aparcamientos, siempre se saca un rato para la lectura...

Anónimo dijo...

Por5 no hablar del problema de la alimentación. Mi chica y yo salimos la otra noche con una pareja de amigos para festejar nuestro último día sin niños , habilmente colocados con las respectivas abuelas, pero ¡Ay! ¡Cuán breve es el sosiego! ya nos tocaba a cada uno ir a por sus respectivos vástagos.
Pues bien, encargado yo de reservar algún lugar donde tuvieran a bien alimentarnos, fui peregrinando de puerta en puerta cual leproso con campanilla y no logré encontrar sitio hasta la sexta intentona, tras un largo paseo de puertas selladas por agosto o locales repletos de náufragos más afortunados que yo.
Eso sí, debo añadir que la noche fue un éxito y volvimos a nuestros hogares cargados de ánimos y de un par de litros de lambrusco (no creo necesario decir qué tipo de restaurante fue el que nos acogió)
El municipio debería tomar cartas en el asunto, estableciendo rigurosos listados de servicios mínimos rotatorios, o medidas similares, para no permitir que sus sufridos pagadores de impuestos pasen necesidad en estas duras semanas