martes, 1 de agosto de 2006

¡Adiós, Coma-andante!

Casi 48 años han pasado desde que se publicó esta portada. Toda una vida. En ese tiempo millones de cubanos, tres generaciones, tuvieron que abandonar su país y nunca pudieron regresar.

La hedionda propaganda castrista les llamaba "gusanos". Eran, en realidad, los representantes del talento, la vitalidad y la libertad de un pueblo, lejos de la siniestra prisión en que se fue convirtiendo su isla. Dignos y valientes (muchos habían creído al principio en las palabras del dictador. Incluso le ayudaron a derrocar al corrupto Batista).

¿Qué va a pasar ahora? En el último número de The New Yorker, el periodista independiente John Lee Anderson –californiano, asiduo al Congreso de Periodismo Digital de Huesca– escribe desde La Habana un documentado artículo, "Castro's Last Battle. ¿Podrá la revolución sobrevivir a su líder?" (no disponible online). Construido a base de testimonios directos –funcionarios del Partido autosatisfechos y expectantes; cubanos de a pie ocupados en sobrevivir
y resolver; opositores internos tolerados y asustados...– leerlo es, en cierto modo, revivir los últimos meses de nuestro propio comandante-generalísimo, aquel otro long duration gallego que también murió en la cama; tan amigo de Fidel, por cierto.

Otro que dejó todo "atado y bien atado"...

20 comentarios:

Anónimo dijo...

Hombre, la verdad es que ya iba haciendo falta un cierto cambio generacional. Seguro que a Raul todavía se le pone dura.

Anónimo dijo...

Perdone mi ingenuidad, Mr. Lynx: algo bueno habrá hecho este señor para mantenerse tanto tiempo en el poder, no?

Anónimo dijo...

Algún talentoso, digo yo, habrá quedado en la isla para alcanzar los niveles de educación, cultura y salud que ha tenido Cuba (y sigue teniendo, ahí están los miles de turistas que usan sus vacaciones para visitar a los médicos cubanos porque les sale más barato que en sus países). Sugerir que el talento se ha ido entero al exilio es, siendo generoso en el calificativo, exagerado. Que Fidel debió dar un paso al costado o al menos abrir la mano hace tiempo, de acuerdo. Que Cuba, situado a 90 millas del peor enemigo posible, ha sido el único país de su entorno sin hambre, sin analfabetismo y sin gente que se muera por falta de atención médica, tambien. Y esto alcanza y sobre para hacer de Fidel el político latinoamericano más notable del siglo XX. Por más errores que haya cometido, y por más que les duela a los señores del exilio que, por cierto, siempre han apoyado a los Bush y personajes semejantes.

Anónimo dijo...

no sabía yo que los miles de turistas, varones, solteros, que visitan cuba lo hacen para visitar al médico

Anónimo dijo...

Ha sido medio siglo de poder esperpéntico y ejecuciones sumarias, de torturas en cárceles demenciales y discursos de ocho horas, de ejércitos de niños programados y policía política en los barrios, de hambreamiento y prostitución del pueblo, de cárceles para homosexuales y sidosos, de extrañamiento de lo mejor de su país y lecciones magistrales sobre meteorología, agricultura, ganadería, estrategia militar, economía. ¿Acaso nadie recuerda que la tiranía es inseparable de la persona del tirano? Pues nada, hombre, que se recupere, que se recupere.

Anónimo dijo...

Así que mantenerse mucho tiempo en el poder es síntoma de hacer las cosas bien... Vaya por delante mi reconocimiento de los logros de la dictadura castrista, casi todos los regímenes hacen alguna cosa bien, pero cualquiera que se mantenga en el poder, sea el tiempo que sea, sin el respaldo de una votación popular, no merece mi respeto. Por cierto, certifico la maestría de los oftalmólogos y estomatólogos cubanos, pero también certifico que la inmensa mayoría de turistas que van a Cuba, no llenan, ni mucho menos, sus consultas.

Anónimo dijo...

Hermana de Belén, claró que hizo algo muy bien: afianzarse en el poder durante décadas. ¿Le parece poco? ¡Abajo el régimen castrador y que desaparezca el tirano! Ya es hora, joder.

PD. Sr. Mataderos, en Cuba se muere de hambre de libertad, de analfabetismo moral y qué decir de la atención sanitaria. ¿Cúanta gente, sobre todo niñas, ha contraído enfermedades venereas, incluido el sida, a causa del turismo sexual explotado y consentido por los partidarios del Gran Dictador del Nuevo Milenio. Ni lo saben. ¿Y que los turistas visitan a los médicos cubanos? Claro que les sale más barato: será porque no les cobran los medicamentos de los que carecen.... ¿Pero usted ha visitado la Cuba real? ¿Ha podido comprobar su calidad de vida? ¿La cambiaría por la suya? No creo.

Anónimo dijo...

Crash diets are no good. Dice uno de los titulares de la portada de Life donde aparece La Tortuga Roja. Pues va a ser cierto: el régimen de choque no le ha sentado nada bien al pueblo cubano.

Tortuga: reptil lonjevo.

Anónimo dijo...

Nada, tranquilos, el neoliberalismo acabará haciéndoles libres. Todos esos talentosos que ahora están en Miami podrán volver y forrarse. Más, quiero decir. Y en la isla por fin habrá ricos. Los pobres serán más pobres aún, pero hey, serán libres, que es de lo que se trata ¿no? Y cuando se acabe el régimen de Castro el papel higiénico por fin dejará de ser un producto de lujo.

Seguro que los cubanos agradecen a sus vecinos el embargo económico, comercial y financiero al que han sometido la isla desde 1962 y les recibirán con los brazos abiertos.

Y seguro que las adolescentes cubanas que han tenido que prostituirse por una pastilla de jabón todos estos años sienten una gran estima por todos los viejos (y no tan viejos) verdes europeos y demás que van a la isla buscando carne fresca. ¿O realmente creían ustedes que con el cambio de latitud se metamorfoseaban en el macho alfa que toda jovencita sudamericana desea para poder gosssssssar?

Sí, porque la gente que se quedó en la isla sabe que las miserias que pasan son todas culpa de ese Fidel malo. Y a los que no piensan así les han lavado el cerebro. Pero ya les enseñaremos nosotros como tienen que pensar ¿verdad?

Anónimo dijo...

Nuala, su empanada mental es + q notable; amuéblese las ideas, por su bien: neoliberalismo, ricos, embargo, viejos verdes, sudamericanas...

¿Qué está tratando de decirnos?

¿Que los problemas de los cubanos se deben al liberalismo y a la ausencia de intercambios comerciales con USA?
¿Que gracias a Fidel son todos igual de pobres, indignos y miserables?

¿No será usted la verdadera Belén Gopegui?

Anónimo dijo...

Amigo beriberi: bonito nick el suyo. Sabrá, sin dudas, que el beriberi es una enfermedad, muy grave, relacionada con la desnutrición, lo que lo relaciona muy directamente con el tema que nos ocupa. ¿Cuánta desnutrición hay o hubo en Cuba durante los últimos 40 años? ¿Y cuánta en Haití, República Dominicana, Honduras, El Salvador, Guatemala, Brasil y el resto de Latinoamérica? Es obvio que ni usted ni yo cambiaríamos nuestra calidad de vida por la existente en Cuba. Pero esa es una falsa comparación, una argucia muy socorrida y demagógica. Preséntele usted la calidad de vida cubana (tal vez no la actual, pero sí el promedio de las últimas cuatro décadas) a un trabajador de la zafra de Haití, a un campesino guatemalteco o a un habitante de una favela de Río de Janeiro y verá si le gustaría cambiarla o no. Observar la realidad desde Europa (occidental, claro, Albania es otra cosa), sólo con la visión europea y exclusivamente con parámetros europeos es ver una realidad a medias, desnutrida, quizás enferma de beriberi. Tenga usted cuidado.

Anónimo dijo...

anonymous, yo siempre firmo con el mismo nombre. Mi identidad real la conoce mucha gente a estas alturas, empezando por casi todos los blogueros que comento. No necesito esconderme.

Mis ideas, con las que ni usted ni nadie tiene que estar de acuerdo, las tengo muy claras y suelo expresarlas con un lenguaje acorde; si no me entiende el problema obviamente es suyo. Pruebe a leer más para desarrollar su comprensión lectora.

Por cierto, otra cosa que me diferencia de usted es que yo entro aquí para comentar los posts, no para descalificar a quienes no opinan como yo. Y por supuesto cuando me aluden contesto, pero esta discusión acaba aquí por lo que a mi respecta.

Si quiere jugar a los trolls le recomiendo el blog de Arcadi Espasa o el de Escolar, allí le entraran al trapo.

Anónimo dijo...

Bravo, Nuala! Veo que no precisa ni de mis servicios ni de los de ningún otro colega.

Anónimo dijo...

Es interesante estos días zappear el Digital +, canal 305 (Cubavisión). Es como hace 31 años pero en color (aunque algunos tuvieron su primera tele en colores precisamente cuando la muerte de Franco).

Sobre la cuestión, es categórico que la dictadura castrista es, hoy por hoy, deleznable. Pero es igualmente deleznable (aunque no sea igual) que las lecciones de democracia se preparen en las mesas donde se piensa más en el reparto del botín de la Cuba que viene.

Cuando alguien me convenza de que desde 90 millas al norte se piensa realmente en la libertad de los cubanos, me pondré junto a la pancarta.

Mientras tanto, prefiero ayudar o con mis oraciones (es un decir) o con mis contribucines a la Cruz Roja.

Anónimo dijo...

Nada, nada... me ha convencido. Estoy con usted, mataderos. Lo mío es pura demagogia, producto de mi visita a la Cuba que el turista y los ciegos intelectuales contemplan como exótica. Allí nadie pasa hambre ni necesidades: visité a un prestigioso ginecólogo de la Habana y en su despensa sólo había arroz y frijoles; y un responsable de los campos de cultivo de tabaco, sólo me pudo ofrecer una jarra de agua con azúcar. Su frigorifico era un desierto. Y una negrita, menor de edad, me insinuó que si le compraba un paquete de galletas en el bar donde almorzaba, me "haría feliz". Le compré las galletas, que era para su hermano pequeño, y se fue agradecida. De estas puede contarle decenas... Como también puedo contarle de la ostentosidad en la que se mueven los poderes fácticos de la isla: no les faltaba de nada en el menú. Productos de mi lógica demagoga, que me causó un síndrome de Stendhal, pero del empacho de tanta miseria y miserable. ¡Viva la dictadura!... Siempre que venga del lado zurdo. Mola fusilar a un disidente en Cuba, pero es profundamente criticable que en un estado de EE UU se cargen a un violador múltiple. Otra vez, mi vena demagógica, lo siento.

PD. ¿Por qué me compara Cuba con países aún más desatrosos? ¿Por qué no con USA o España? ¿Por qué no dejar que los cubanos decidan su futuro, si seguir con el idílico castrismo o sucumbir al neoliberalismo? Esta muy bonito ver los toros desde la barrera.

Anónimo dijo...

Desde la barrera: "de qué "botín" habla, por favor? La economía cubana (hiperplanificada, ultrasocialista) está en estado agónico cuasi-terminal; se mantiene, en parte, gracia al flujo de dólares enviados desde Miami a los familiares que se quedaron

Se trata SÓLO de dejar que los propios cubanos administren su país: Elecciones LIBRES y economía de mercado, por supuesto. Así de fácil.

Y tranquilo, no olvide que "90 millas al norte" viven más cubanos que en la propia Habana... sólo en el Estado de Florida.

O sea, que me gustaría verle a usted "junto a la pancarta"

Anónimo dijo...

Los camaradas roban, trafican con coca, apalean a los "mariconsones", chulean a las mulatas del Malecón, torturan y asesinan. Pero, La Idea... ¡es tan bella!
La Revolución, El Socialismo. Eso es lo que de verdad importa. Lo otro son minucias.

La culpa de todo la tuvo el bloqueo. (porque la miseria moral y material en la que está hundida Cuba, por supuesto, nada tiene que ver con el socialismo. Como tampoco los principios doctrinales socialistas albergaron relación alguna con la miseria material y moral que enfangó a la Europa atrapada tras el Muro. Igual que ni uno solo de los 100 millones de muertos que arrojó la utopía colectivista en las cunetas de la Historia podría proyectar la menor sombra de duda sobre la superioridad ética del socialismo. Por eso, no hay nada de que discutir: toda la culpa fue del bloqueo. Y si no hubiera sido del bloqueo, sería de Castro. Y si no fuera de Castro, sería del Partido. Y si no fuera del Partido, sería de Stalin. Y si no fuera de Stalin, sería de Lenin. Y si no fuera de Lenin, seria de las condiciones objetivas. Y si no, de quien sea, tanto da. Pero NUNCA DEL SOCIALISMO.)

Anónimo dijo...

Los tres millones de cubanos de Estados Unidos no son la extrema derecha. Son la libertad. Son la esperanza de Cuba. Tienen el ímpetu, las ganas, el conocimiento, los recursos, la influencia sobre importantes centros de decisión política y económica.

Anónimo dijo...

Supongo que ya vio que "El País" reprodujo, bien traducido, el artículo del New Yorker que usted cita; en dos entregas sucesivas. Tenía usted razón; era una buena pieza periodística.

(Otras crónicas sobre Cuba que estos días no están nada mal son las de Joaquim Ibarz en La Vanguardia)

Fred Alvarez Palafox dijo...

El texto de lee Anderson esta el madrileño El País, pueden verlo completo en mi bitacóra: http://fredalvarez.blogspot.com/